PSICODIAGNÓSTICO
Un psicodiagnóstico es un análisis psicológico o evaluación psicológica de la personalidad del sujeto, que puede estar relacionado con cualquiera de los siguientes rasgos de personalidad o características psicológicas, y podemos agruparlos en dos grandes áreas:
-Evaluación de la inteligencia, memoria, atención, lenguaje, funciones ejecutivas, inteligencia emocional.
-Evaluación de la personalidad, rasgos psicológicos, psicopatología, ansiedad, estrés, depresión.
Dentro de dicho diagnóstico se evalúan las distintas áreas del funcionamiento psicológico del paciente (afectiva, cognitiva y relacional), y se intenta definir las características de personalidad y conflictos que subyacen al motivo de consulta que la persona trae consigo.
La entrevista clínica es la primera y más importante herramienta dentro de un proceso psicodiagnóstico. Esta etapa le brinda al profesional un conocimiento global de la persona consultante, para esto resulta esencial el discurso del propio paciente sobre sí mismo y respecto de lo que le está sucediendo.
Durante las entrevistas clínicas se recaban antecedentes del motivo de consulta, del desarrollo e historia de vida, relaciones sociales, familiares y de pareja, área vocacional- laboral, historia de tratamientos anteriores, entre otros.
COSMOVISIÓN CRISTIANA
¿Qué es eso?
Nuestra visión del mundo afecta todo lo que hacemos, lo reconozcamos o no.
El término “cosmovisión” se usa para describir un conjunto central de valores y principios a través de los cuales se entiende el mundo. Una cosmovisión es una compilación de las percepciones del mundo de un individuo, esencialmente la forma en que una persona entiende la realidad. La cosmovisión de una persona es muy importante, ya que afecta prácticamente todas las decisiones de la vida. Entonces, una cosmovisión específicamente cristiana estaría viendo el mundo a través de un lente cristiano/bíblico. Una cosmovisión cristiana es aquella en la cual la Biblia es formativa.
Una visión del mundo es integral en su impacto. Nuestra visión del mundo afecta todo lo que hacemos, lo reconozcamos o no. Nuestra visión del mundo afecta cómo gastamos dinero, cómo tratamos a nuestros cónyuges e hijos, por quién votamos, cómo tratamos a la naturaleza, qué elegimos hacer con nuestro tiempo. Una cosmovisión cristiana verdadera y exhaustiva no es algo que pueda existir solo en la iglesia los domingos. No hay separación entre la cosmovisión cristiana y la vida cotidiana. Jesús mismo debe ser nuestra cosmovisión (Juan 14: 6). Formar nuestra cosmovisión sobre su vida y sus enseñanzas es la única forma de navegar a través de este mundo. De eso se trata una cosmovisión cristiana.
En esta materia también revisaresmo contenidos educativos que tienen que ver con capacidades y conocimientos de un Líder cristiano así como de la Consejería cristiana.
DR. HECTOR SALINAS
Director